domingo, 27 de noviembre de 2016

Freud.

Con Sigmund Freud vamos a seguir adelante con la serie de los filósofos, sin más distracciones vamos a ello.

Sigmund Freud nació en Príbor en el año de 1856, falleció en Londres en el año de 1939. Destacó por su contribución al mundo de la neurología, la psicoterapia y el psicoanálisis. 

Freud divide la psique de las personas en tres entes:

- El Ello: es la parte instintiva donde habitan todas las represiones producidas en el individuo, se guía por el principio del placer.

- El Super-Yo: representa la exigencia ética y moral de la persona. Es donde residen todas las interiorizaciones morales y culturales del individuo constituyendo el ideal del Yo, funciona según el principio del deber.

- El Yo: son los elementos conscientes que tienen como misión adaptarnos a la realidad; por ello funciona según el principio de la realidad, (conveniente-inconveniente).

Estos conceptos del Yo, el Super-Yo y el Ello contribuyen a la concepción que el individuo hace de Dios y la religión. Para Freud las ideas religiosas son una ilusión originadas por la sensación de impotencia característica de la niñez que nos lleva a buscar en Dios la figura de un "padre perfecto", lo que conlleva la justificación de las desgracias como parte de un plan divino superior, lo que vuelve a las personas religiosas unos individuos neuróticos a ojos de Freud, pero una ilusión necesaria en la evolución del ser humano, si bien ya dejó de ser necesaria hace mucho tiempo; y es que en opinión de Freud no lograremos avanzar y progresar hasta que no desechemos por completo toda forma de pensamiento mítico.

Frente a las posiciones de Freud están quienes le acusan de estudiar los efectos negativos de la religión en personas enfermas lo que le resta valor "científico" a sus conclusiones. Quienes le critican también defienden que el hecho de que un individuo busque seguridad psicológica en algo que llama Dios no dice nada a favor o en contra de la existencia de un Dios independientemente de los deseos humanos; además Freud habla de un Dios autoritario y represor que nada tiene que ver con el Padre misericordioso predicado por Cristo en el Evangelio.

Con esto llegamos al final de otro artículo; esperen al siguiente que llegará pronto.

sábado, 26 de noviembre de 2016

Feuerbach.

Con esta entrada sobre Ludwig Feuerbach da comienzo una serie de entradas que tendrá como principal objetivo dar a conocer a algunos grandes filósofos de la Historia no muy conocidos, sus ideas y la relación que estas tenían con la religión.


Ludwig Feuerbach nació en Baviera en el año de 1804, falleció en Nurémberg en el año de 1872. Destacó por su concepción antropológica de la Filosofía y en 1839 desarrolló una crítica de la Filosofía Hegeliana.

Para Feuerbach el ser humano se diferencia de los animales por que es capaz de desarrollar conciencia de si mismo. En su opinión el hombre religioso proyecta lo que él mismo es fura de sí en forma de Dios, siendo Dios por tanto un reflejo del hombre y la proyección que este tiene de un pueblo ideal, lo que convierte al hombre religioso en un ser alienado y extraño para sí mismo. Por ello según Feuerbach Dios no es más que un espejo del hombre y la religión una proyección de la conciencia del ser humano. Es por esto que para Feuerbach el ser humano no podrá gozar de la libertad y la felicidad hasta que no rompa las cadenas que lo retienen, estas cadenas son: Dios y la religión.

A causa de estas anticlericales declaraciones Feuerbach recibió la crítica de los sectores creyentes que le acusaban de partir de una realidad personal y extrapolarla a toda la sociedad, además defendían que imaginar algo no dice nada, a favor o en contra, de la existencia de ese algo y que las sociedades laicas no son necesariamente felices.

Con esto llegamos al final de este artículo, nos veremos en el siguiente.